¿Cómo es la instalación de agua caliente sanitaria o ACS?

Las instalaciones de ACS (agua caliente sanitaria) calientan, almacenan y distribuyen agua potable para el consumo humano a través de duchas, grifos y electrodomésticos. Se estima que una persona consume entre 50 y 100 litros de agua caliente de media al día.

¿Qué tipos de sistemas de agua caliente sanitaria existen?

En función del modo de producción de agua caliente podemos encontrar tres tipos de sistemas de ACS: por acumulación, instantáneos y mixtos o semi-instantáneos.

Sistemas por acumulación

Una instalación de ACS por acumulación consta de:

1. Un generador de calor, como una caldera o una bomba de calor, que calienta el agua.
2. Un depósito que almacena el agua caliente y lo suministra en el momento en el que el usuario realiza la demanda.

Estos sistemas son los más eficientes, pues reducen los picos de consumo que se producen con cada arranque del sistema y logran mantener una temperatura estable gracias al aislamiento térmico. Pueden utilizar energías tan dispares como el gas natural, la aerotermia o la electricidad.

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Su principal inconveniente es que, a medida que se utiliza el agua caliente, el termo se rellena con agua fría y puede suceder que "se acabe el agua caliente" y haya que esperar entre 1 y 4 horas para tener agua caliente de nuevo.

Además, una instalación con depósito ocupa más espacio que un sistema instantáneo.

Sistemas instantáneos

Los sistemas de agua caliente instantánea cuentan con una resistencia eléctrica o un intercambiador de calor que se enciende cuando el usuario hace una demanda de agua caliente y aumenta la temperatura del agua al momento.

La cantidad de agua que pueden calentar estos aparatos depende del caudal. Por ejemplo, un calentador con un caudal de 14 litros por minuto puede calentar un grifo y una ducha, pero si se abren dos grifos y una ducha al tiempo la potencia no será suficiente y el agua no saldrá tan caliente.

Además, su rendimiento es menor que el de los sistemas por acumulación, porque se produce un arranque con cada demanda de agua, por lo que el consumo energético es mayor.

Sistemas mixtos

Las instalaciones de ACS mixtas o semi-instantáneas tienen un pequeño depósito que por norma general acumula menos de 20 litros de agua y, además, cuentan con un intercambiador de calor que sirve de apoyo para el depósito cuando este no puede cubrir la demanda de agua caliente.

Partes de una instalación de ACS

El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía divide las instalaciones de agua caliente en los siguientes componentes:

1. Intercambiador de calor.
2. Depósito de agua caliente.
3. Válvulas reguladoras que controlan la salida de agua caliente.
4. Bombas de circulación.
5. Tuberías.
6. Aislante térmicos.
7. Contador de agua.

Generadores de agua caliente sanitaria

Para poder disponer de agua caliente sanitaria en el día a día tenemos que contar en nuestra vivienda con un generador de energía que caliente el agua fría potable para convertirla en agua caliente sanitaria.

Los calentadores de gas, los termos eléctricos, las calderas de gas y las bombas de calor son los aparatos más comunes para este propósito.

Calentadores de agua caliente

Los calentadores de agua a gas únicamente pueden calentar agua caliente sanitaria. El funcionamiento de este tipo de aparatos es muy sencillo: al abrir el grifo, el agua fría entra al calentador y pasa por el intercambiador de calor donde por efecto de la llama del quemador, se calienta el agua.

El agua no sale caliente de forma inmediata, hay que esperar un poco y su temperatura puede tener variaciones.

El punto positivo es que un calentador de gas o eléctrico permite disponer de suministro de forma ilimitada y de manera económica.

Termos eléctricos

Los termos eléctricos para el agua caliente sanitaria son depósitos de agua de una capacidad entre 50 y 150 litros.

Su instalación es mucho más sencilla que la instalación que supone un calentador de agua o una caldera de gas: basta con acometer la entrada y la salida del agua y enchufarlos a la corriente eléctrica.

Los termos generan tanta agua caliente como capacidad tiene su depósito y una vez se consume hay que esperar a que el agua del depósito se vuelva a calentar. El tiempo que tarda en calentarse el agua depende de la capacidad del depósito y de la calidad del aparato.

Calderas de gas

Existen diferentes tipos de calderas de gas natural, pero las más utilizadas a día de hoy son las calderas de condensación, pues son las más seguras por su tipo de instalación y funcionamiento.

Las calderas de condensación exigen la instalación de dos tubos concéntricos que recogen y expulsan el aire del exterior. Además, es necesario contar con un desagüe para expulsar el agua previamente condensado.

Bombas de calor

También es posible producir ACS mediante una instalación de aerotermia con bomba de calor.

Al igual que una caldera, este sistema cubre tanto las necesidades de climatización del hogar como la producción de agua caliente sanitaria. La principal diferencia es que principalmente utiliza la energía contenida en el aire y consigue hasta un 77% de ahorro respecto a los sistemas no renovables.

Sin embargo, también existen equipos de aerotermia para agua caliente sanitaria exclusivamente, es decir, bombas de calor que solo producen agua caliente sanitaria y no calefacción. Estos equipos son perfectos para sustituir a los termos eléctricos, ya que consumen mucha menos electricidad.

¿Cuál es el precio de una instalacion de agua caliente sanitaria?

El presupuesto para instalar el agua caliente sanitaria varía en función del tipo de generador.

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